Un mensaje llegó a mis manos y me preguntaba ¿quién eres tú? y busque la forma convincente de contestar, no quería fallar o decepcionar con mi respuesta
Busque la respuesta en mi pasado pero como un viento grande y poderoso rompió los montes y quebraba las peñas pero ahí no halle la respuesta
Segui buscando ¿quién eres tú?, busqué en mi logros lo alto que había ascendido, tras el viento un terremoto y todo lo que construí se desvaneció. Un Angel llego a la puerta y me preguntó ¿ hallaste la respuesta?
¿Acaso quién eres tú? Tras el terremoto un fuego, lo único que me quedaba para hallar la respuesta se lo consumió. Así que me postré delante de Jehová y tras el fuego un silbo apacible y delicado oí su voz, cubrí mi rostro, salí a la puerta de la cueva y me pregunto ¿qué haces aquí? Entonces halle la respuesta ¿quién era yo?
1 Reyes 19:11-13
paráfrasis